Se acaba de celebrar los cien primeros días de Gobierno de Zapatero en esta legislatura. La verdad es que este señor por celebrar, celebra hasta las gastronteritis, pues ante el aumento del número de parados y de la inflación, el cierre de pequeñas y medianas empresas, la baja del consumo, el incremento de asesinatos, la banca que no da prestamos,...... el panorama es como para no celebrar estos días, más bien es para olvidarlos.
El Señor Sonrisa es todo satisfacción, el se da dos besos todas las mañana, se quiere. Ello me parece muy bien, pero a un Presidente de Gobierno se le pide que gestione y de soluciones, sólo palabras bonitas hay que esperarlas de los sicólogos profesionales. Son tiempos duros, pero aquí es peor por la falta de medidas y la desconfianza que esta inspirando el Gobierno, que con palabras bonitas, mentiras y eludir las realidades al final esta consiguiendo el efecto contrario al que pretende.
Asombroso es que todo su partido, el PSOE, le sigue sin rechistar. Ahora, un gran mitín celebración de los cien días, todos corriendo. La autocrítica ha sido sustituida por la elevación a los altares del LIDER, que diga lo que diga tiene razón, es el más guapo, más inteligente y sonrie mejor. Ese endiosamiento de los lideres no me gusta, diría que es poco democrático, me recuerda grandes fracasos de la historía.
Me preocupan los 1.360 días que quedan de legislatura, espero que no sean iguales a los primeros cien días, por el bien de los ciudadanos.
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